Archivos

4/29/2020

Pastor Tomas - 4/29/2020

Estudio de Génesis 48 Parte 1 - Jacob bendice a los hijos de José

1. Jacob recuerda la promesa de Dios.
Génesis 48:1-4 Sucedió después de estas cosas que dijeron a José: He aquí tu padre está enfermo. Y él tomó consigo a sus dos hijos, Manasés y Efraín. 2Y se le hizo saber a Jacob, diciendo: He aquí tu hijo José viene a ti. Entonces se esforzó Israel, y se sentó sobre la cama, 3y dijo a José: El Dios Omnipotente me apareció en Luz en la tierra de Canaán, y me bendijo, 4y me dijo: He aquí yo te haré crecer, y te multiplicaré, y te pondré por estirpe de naciones; y daré esta tierra a tu descendencia después de ti por heredad perpetua
a. Muchos Creyentes piensan que la vida cristiana no tienen valles
b. Todo bien hasta que recibió la llamada
c. “La vida es real.”
1 Corintios 10:13 No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.
d. Las tentaciones que enfrentan en su vida no son distintas de las que otros atraviesan.
2 Corintios 12:8-9 Respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. 9Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.
e. Pablo tuvo una dificultad en su vida - En tres ocasiones distintas, le supliqué al Señor que me la quitara.
f. Cuando José llegó, Jacob cobró fuerzas y se incorporó en su cama.
g. Es importante que nosotros hacemos como Jacob hizo, recordamos las promesas de Dios a nosotros.
h. Jacob le dijo a José: “El Dios Todopoderoso se me apareció en la aldea de Luz, en la tierra de Canaán, y me bendijo
i. Dios le bendijo con estas palabras:
Tito 1:14 No atendiendo a fábulas judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad.
Mateo 4:6-7 Y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, m y, en sus manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra. 7Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.
Salmos 91:11-12 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. 12En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra.
Deuteronomio 6:16 No tentaréis a Jehová vuestro Dios, como lo tentasteis en Masah.
2 Timoteo 3:16-17 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
17a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
j. Toda la Escritura es inspirada por Dios
2. Jacob adopta a los hijos de José como suyos.
Génesis 48:5-6Y ahora tus dos hijos Efraín y Manasés, que te nacieron en la tierra de Egipto, antes que viniese a ti a la tierra de Egipto, míos son; como Rubén y Simeón, serán míos. 6Y los que después de ellos has engendrado, serán tuyos; por el nombre de sus hermanos serán llamados en sus heredades.
a. Los tres versículos son un poco complicados (5-7)
b. Como Rubén y Simeón, serán míos: Rubén y Simeón fueron el primero y el segundo que nacieron de Israel. Jacob recibe a los dos hijos de José, como adoptados en la familia al más alto nivel (como si fueran el primer y segundo hijo).
c. Dado que el número 12 a menudo se asocia con el gobierno o la administración ante los ojos de Dios.
d. Jacob concluye su testimonio con un ojo a su muerte pronto.
Génesis 48:7Porque cuando yo venía de Padan-aram, se me murió Raquel en la tierra de Canaán, en el camino, como media legua de tierra viniendo a Efrata; y la sepulté allí en el camino de Efrata, que es Belén.

3. Jacob llama a los hijos de José, para bendecirlos.
Génesis 48:8-12 Y vio Israel los hijos de José, y dijo: ¿Quiénes son éstos? 9Y respondió José a su padre: Son mis hijos, que Dios me ha dado aquí. Y él dijo: Acércalos ahora a mí, y los bendeciré. 10Y los ojos de Israel estaban tan agravados por la vejez, que no podía ver. Les hizo, pues, acercarse a él, y él les besó y les abrazó. 11Y dijo Israel a José: No pensaba yo ver tu rostro, y he aquí Dios me ha hecho ver también a tu descendencia. 12Entonces José los sacó de entre sus rodillas, y se inclinó a tierra.
a. Entonces Jacob miró a los dos muchachos. —¿Son estos tus hijos?
b. José le dijo “Estos son los hijos que Dios me ha dado aquí en Egipto.”
Entonces Jacob le dijo a José: —Nunca pensé que volvería a ver tu rostro, ¡pero ahora Dios me ha permitido ver también a tus hijos!